Se imagina una Cárcel sin Policias?
01.08.2011 15:46
Se imagina una cárcel sin policías? Yo sueño con ello, y espero que esto se haga realidad en el próximo futuro.
Ramiro Llanos Moscoso
Se imagina una cárcel sin policías? Yo sueño con ello, y espero que esto se haga realidad en el próximo futuro.
Las cárceles administradas por el Ministerio de Gobierno a través de la Dirección General de Régimen Penitenciario, como las que conocemos, solo han convertido a estos centros en basureros humanos, donde el Estado en pocas oportunidades ha invertido dinero en la arquitectura y ha dejado en el abandono las infraestructuras y a la población penitenciaria.
Quienes estuvieron a cargo de la administración de las cárceles desde la fundación de la República fueron la Policía Boliviana y el Ministerio del Interior hoy conocido como Ministerio de Gobierno.
Por las denuncias ya conocidas ampliamente por todos, la policía que está a cargo de la seguridad penitenciaria de las cárceles, ha perdido la oportunidad de seguir con esta responsabilidad.
Las denuncias de corrupción y manejo arbitrario en las cárceles son conocidas por todos en nuestro país y aun se insiste en querer resolver este problema de manera administrativa.
Todos sabemos que en las cárceles los privados de libertad se contaminan con alcohol y drogas que ingresa por las puertas ya sea de día o de noche.
Todos sabemos que en la cárcel se realizan favores de manera ilícita, se cobra en las puertas y se limpian y acomodan los informes de conducta que llegan a los jueces.
Como seguir con el modelo de administración de cárceles que no funciona, que ha fracasado?
Las cárceles manejadas como están ya no sirven para el fin ultimo de la pena que es proteger a la sociedad contra el delito y lograr la enmienda, readaptación y reinserción social del condenado, a través de una cabal comprensión y respeto a la Ley.
Solo queda resolver políticamente la problemática penitenciaria para dar una respuesta adecuada al crecimiento de la delincuencia y permitir la rehabilitación de los ofensores.
Que se hizo ante la falta de respuestas administrativas y políticas? Surgió una respuesta de la comunidad que se planteo la construcción de un centro penitenciario para jóvenes con un nuevo enfoque basado en la justicia restaurativa.
Para alegría de todos en cercanías a la ciudad de Viacha se esta terminando de construir una cárcel para jóvenes llamado “Calahuma”, donde todo el proceso de rehabilitación a los privados de libertad seria encarado a través del sistema progresivo, dando oportunidad de mejoramiento de vidas a través del trabajo y la educación, brindando seguridad en su interior, haciendo que los meritos por buen comportamiento se valoren para la futura libertad de todos quienes estarán en el interior de este centro y todo este trabajo penológico permitirá que los jóvenes sentenciados pueden retornar a la sociedad de manera positiva para contribuir a ella.
Un nuevo paradigma de rehabilitación y de mejoramiento de vida ha sido asumido por varias instituciones y ONGs en el centro Calahuma, todos nos sentimos orgullosos de haber contribuido de manera colectiva en la construcción de esta cárcel para jóvenes que en estos días se inaugura. El aporte para la construcción provino de fuentes privadas, iglesias, Ongs en un 95% y el aporte del Estado fue del 5%, debiendo ahora la administración penitenciaria hacerse cargo de la alimentación, pago de servicios básicos, contratación de personal técnico y otros que garanticen la continuidad de su funcionamiento.
Toda la administración y funciones de Calahuma debe estar a cargo de personal civil y voluntariado técnico, esto quiere decir que deben hacerse cargo desde la seguridad, revisión en puertas, control de ingreso de materiales, alimentos, personas, tratamiento penitenciario con énfasis en la educación, en el trabajo, en la formación de hábitos de buen comportamiento, hasta el trabajo con voluntarios, se deben asumir la tendencia mundial de civilizar los centros penitenciarios basados en los derechos humanos.
Esta cárcel no debe ser corrompida como las otras que funcionan en nuestro país y para evitar esto mínimamente debe cumplir con lo siguiente:
* El control de la seguridad interna y externa debe estar a cargo de personal civil.
* Contar con personal técnico penitenciario capacitado.
* Solo aceptar a personas privadas de libertad sentenciadas hasta los 25 años.
* El tratamiento penitenciario debe estar basado en el sistema progresivo.
* Contar necesariamente con un régimen cerrado y mantener al privado de libertad en ese lugar hasta que haya demostrado cambios positivos en su vida.
* Desarrollar actividades artesanales en una primera fase.
* Involucrar a la comunidad con la participación activa de voluntarios
* Realizar cursos de voluntariado técnico.
* Abrir el centro penitenciario a los egresados y profesionales de la UPEA, la UMSA y otros institutos superiores para que concluyan con su formación.
* No experimentar, ni improvisar, sino darle profesionalidad y eficacia a la metodología del tratamiento penitenciario.
* Trabajar bajo la convicción de que el preso ayuda a otro preso en la rehabilitación.
* No olvidar de que es una cárcel y que las personas en su interior están cumpliendo una sentencia por los errores cometidos o por los daños causados.
* La disciplina, la integración a la vida y trabajo comunitario es esencial en el privado de libertad para su clasificación y acumulación de meritos.
Todo lo que se haga en Calahuma servirá en el futuro para demostrar que se pueden manejar centros penitenciarios con personal civil por un lado y por otro para exigir la elaboración y aprobación de una Ley de Justicia Penal Juvenil, ausente en nuestro país.
Fuente:
SE IMAGINA UNA CÁRCEL SIN POLICÍAS?
Lunes, 21 de Febrero de 2011
Se imagina una cárcel sin policías? Yo sueño con ello, y espero que esto se haga realidad en el próximo futuro.
Ramiro Llanos Moscoso
Se imagina una cárcel sin policías? Yo sueño con ello, y espero que esto se haga realidad en el próximo futuro.
Las cárceles administradas por el Ministerio de Gobierno a través de la Dirección General de Régimen Penitenciario, como las que conocemos, solo han convertido a estos centros en basureros humanos, donde el Estado en pocas oportunidades ha invertido dinero en la arquitectura y ha dejado en el abandono las infraestructuras y a la población penitenciaria.
Quienes estuvieron a cargo de la administración de las cárceles desde la fundación de la República fueron la Policía Boliviana y el Ministerio del Interior hoy conocido como Ministerio de Gobierno.
Por las denuncias ya conocidas ampliamente por todos, la policía que está a cargo de la seguridad penitenciaria de las cárceles, ha perdido la oportunidad de seguir con esta responsabilidad.
Las denuncias de corrupción y manejo arbitrario en las cárceles son conocidas por todos en nuestro país y aun se insiste en querer resolver este problema de manera administrativa.
Todos sabemos que en las cárceles los privados de libertad se contaminan con alcohol y drogas que ingresa por las puertas ya sea de día o de noche.
Todos sabemos que en la cárcel se realizan favores de manera ilícita, se cobra en las puertas y se limpian y acomodan los informes de conducta que llegan a los jueces.
Como seguir con el modelo de administración de cárceles que no funciona, que ha fracasado?
Las cárceles manejadas como están ya no sirven para el fin ultimo de la pena que es proteger a la sociedad contra el delito y lograr la enmienda, readaptación y reinserción social del condenado, a través de una cabal comprensión y respeto a la Ley.
Solo queda resolver políticamente la problemática penitenciaria para dar una respuesta adecuada al crecimiento de la delincuencia y permitir la rehabilitación de los ofensores.
Que se hizo ante la falta de respuestas administrativas y políticas? Surgió una respuesta de la comunidad que se planteo la construcción de un centro penitenciario para jóvenes con un nuevo enfoque basado en la justicia restaurativa.
Para alegría de todos en cercanías a la ciudad de Viacha se esta terminando de construir una cárcel para jóvenes llamado “Calahuma”, donde todo el proceso de rehabilitación a los privados de libertad seria encarado a través del sistema progresivo, dando oportunidad de mejoramiento de vidas a través del trabajo y la educación, brindando seguridad en su interior, haciendo que los meritos por buen comportamiento se valoren para la futura libertad de todos quienes estarán en el interior de este centro y todo este trabajo penológico permitirá que los jóvenes sentenciados pueden retornar a la sociedad de manera positiva para contribuir a ella.
Un nuevo paradigma de rehabilitación y de mejoramiento de vida ha sido asumido por varias instituciones y ONGs en el centro Calahuma, todos nos sentimos orgullosos de haber contribuido de manera colectiva en la construcción de esta cárcel para jóvenes que en estos días se inaugura. El aporte para la construcción provino de fuentes privadas, iglesias, Ongs en un 95% y el aporte del Estado fue del 5%, debiendo ahora la administración penitenciaria hacerse cargo de la alimentación, pago de servicios básicos, contratación de personal técnico y otros que garanticen la continuidad de su funcionamiento.
Toda la administración y funciones de Calahuma debe estar a cargo de personal civil y voluntariado técnico, esto quiere decir que deben hacerse cargo desde la seguridad, revisión en puertas, control de ingreso de materiales, alimentos, personas, tratamiento penitenciario con énfasis en la educación, en el trabajo, en la formación de hábitos de buen comportamiento, hasta el trabajo con voluntarios, se deben asumir la tendencia mundial de civilizar los centros penitenciarios basados en los derechos humanos.
Esta cárcel no debe ser corrompida como las otras que funcionan en nuestro país y para evitar esto mínimamente debe cumplir con lo siguiente:
* El control de la seguridad interna y externa debe estar a cargo de personal civil.
* Contar con personal técnico penitenciario capacitado.
* Solo aceptar a personas privadas de libertad sentenciadas hasta los 25 años.
* El tratamiento penitenciario debe estar basado en el sistema progresivo.
* Contar necesariamente con un régimen cerrado y mantener al privado de libertad en ese lugar hasta que haya demostrado cambios positivos en su vida.
* Desarrollar actividades artesanales en una primera fase.
* Involucrar a la comunidad con la participación activa de voluntarios
* Realizar cursos de voluntariado técnico.
* Abrir el centro penitenciario a los egresados y profesionales de la UPEA, la UMSA y otros institutos superiores para que concluyan con su formación.
* No experimentar, ni improvisar, sino darle profesionalidad y eficacia a la metodología del tratamiento penitenciario.
* Trabajar bajo la convicción de que el preso ayuda a otro preso en la rehabilitación.
* No olvidar de que es una cárcel y que las personas en su interior están cumpliendo una sentencia por los errores cometidos o por los daños causados.
* La disciplina, la integración a la vida y trabajo comunitario es esencial en el privado de libertad para su clasificación y acumulación de meritos.
Todo lo que se haga en Calahuma servirá en el futuro para demostrar que se pueden manejar centros penitenciarios con personal civil por un lado y por otro para exigir la elaboración y aprobación de una Ley de Justicia Penal Juvenil, ausente en nuestro país.
Fuente: